Ejército Imperial

En la época de Karl Franz, los ejércitos eran ofensivos, y los Electores veían a
sus tropas como una medida de poder en el equilibrio de fuerzas del Imperio, y una forma de garantizar que los súbditos acatasen el poder de las Cortes provinciales.
Quizás, con la Segunda Gran Guerra contra el Caos, esto cambie, y los ejércitos vuelvan a servir solamente para proteger a la gente del Caos y demás amenazas para la humanidad. Quizás.

El soldado imperial
Dentro del amplio imperio, la variedad humana es remarcable, y nunca esto queda más de manifiesto que en sus ejércitos. En la batalla de Middenheim, junto a devotos de Ulric que un mes antes trabajaban en una mina en las montañas de Middenland, luchaban burgueses ricos de alguna ciudad comercial de los márgenes del Reik. En alguna ocasión, un recluta campesino de Stirland peleaba codo con codo con un nobleguerrero de las llanuras de Averland. Así, no hay un perfil estándar de soldado, ni en cuanto a motivaciones, origen ni equipo, pero sí que podemos aproximarnos, dentro de
un límite, a lo que es el soldado medio que sirve en los ejércitos del Imperio.
Infantería
Los infantes imperiales pueden dividirse en tres grandes grupos: soldados profesionales,
mercenarios y milicianos y reclutas, aunque a veces las fronteras entre los tres grupos
sean confusas(los soldados pueden considerarse mercenarios que sirven a un patrón fijo)
incluso dentro del mismo individuo, como se verá más tarde.

Los soldados profesionales
Se trata de guerreros a tiempo completo( no se están pegando todos los días, pero sí
recibiendo entrenamiento, sirviendo en guarniciones).Normalmente son reclutados y
entrenados por el Emperador o un Elector, y están a su servicio.

Los mercenarios
Se trata de soldados profesionales, pero lo que define al mercenario es su alternancia en
materia de patronos. Su profesión es la guerra, pero no por una causa o al servicio de
alguien en concreto. Se trata de un grupo heterogéneo, en el que se incluyen desde
extranjeros o miembros de razas no humanas( una en concreto, la de los ogros, a llevado
esta profesión a la cúspide de su cultura), a antiguos reclutas y soldados que no quieren
tener un patrón fijo, o que han sido licenciados.

Los milicianos y reclutas
Se trata de gente que civiles que luchan como si fueran soldados. Ésta quizás sea la
definición más satisfactoria. Se trata de gente que tiene un oficio fuera del ejército( o
no, si es un vagabundo, pero se entiende lo que quiero decir) pero que es movilizado en
un momento dado. Muchos de ellos pueden tener un entrenamiento marcial previo,
como es el caso de algunos devotos de religiones marciales como la de Sigmar o Ulric,
de los pertenecientes a milicias locales o gremiales, guardias, etc... pero esto no es
necesario para pertenecer a este grupo.
Por supuesto, muchos cruzan la barrera entre estas tres clases. Gran número de
mercenarios empezó sus días como soldados al servicio de un Estado Imperial, para
seguir su propio camino una vez licenciados.

Armamento
El arma tradicional de la infantería es la alabarda. Permite asestar golpes duros, pinchar
y mantener a raya al enemigo, y una fuerza profesional de alabarderos puede enfrentarse
a la caballería pesada, sino de igual a igual, con posibilidades de éxito. Una novedad en
el norte del Viejo Mundo es la pica, la lanza alargada, que cada vez gana más
popularidad. Una fuerza de piqueros puede llevar a cabo formaciones defensivas casi
imposibles de batir cuerpo a cuerpo, y sobre todo es una baza segura contra la
caballería.
El hacha, la espada y el martillo son aún utilizadas, sobre todo la segunda. Sin embargo,
las armas de asta son más útiles en batallas campales. Las dagas cortas son un
complemento, barato y útil.
En cuanto a las armas de proyectil, tres tipos principales se utilizan en el campo de
batalla: el arco largo, la ballesta y las armas de pólvora. La primera, aunque letal en
manos expertas, requiere de un alto grado de entrenamiento y destreza para usarse
correctamente, lo que le ha hecho perder terreno frente a la sureña ballesta, que
compensa su menor cadencia de fuego con menos requisitos de uso. Las armas de
fuego, más recientes, aún provocan recelos estallando con regularidad. Sin embargo, sus
popularidad crece de día en día.

La caballería
Este cuerpo es diferente del anterior, puesto que por tradición el pelear a caballo era un
privilegio de los nobles. Asimismo, el mantenimiento de un caballo de guerra es caro, y
el entrenamiento en la monta de estos animales está muy restringido. Ponerle una
alabarda en la mano a un recluta entrenarlo unas semanas es relativamente barato, pero
no mantener a un regimiento de caballería. Así, las tropas montadas(relegadas en parte
por las picas y las armas de proyectil) son mucho menos numerosas que la infantería, y
más elitistas.
Una de las fuentes de caballería pesada en el Imperio son las Órdenes militares, que
aportan caballeros a la antigua usanza a los ejércitos condales. Normalmente, las
Órdenes de caballería que residen en una provincia han de aportar efectivos al ejército
de ésta, pero hay excepciones, normalmente para las Órdenes Templarias, que sólo
dependen de la Iglesia a la que le hayan jurado lealtad, y que no pagan impuestos ni
tributos a los poderes laicos. El ejemplo más conocido es el de la Orden del Lobo
Blanco, los templarios de Ulric dios de la guerra. En algunos Estados sigue habiendo
cláusulas de nobleza que obligan a sus propietarios a servir en caso de guerra, pero están
en desuso. La caballería profesional, con los modernos reiters o herreruelos armados
con armas de pólvora, avanza.

La artillería
Es, sin duda, el cuerpo más moderno del ejército imperial, y el más reciente y exclusivo
del Emperador. Aunque incluso los orcos y los bárbaros del Norte(¡incluso los
bretonianos!) cuentan con armas de asedio, la artillería imperial es la más moderna y
efectiva después de la enana. Además de alguna vieja ballista y catapulta que ya ni se
sacan del arsenal, relegadas por la pólvora, el ejército del Emperador cuenta con los
mejores y más modernos cañones de asedio, forjados en Nuln, bombardas y espingardas
para la marina. Sólo esta ciudad y el ejército imperial cuentan con un suministro de
artillería asegurado, en virtud de los tratados comerciales vigentes. El resto de
provincias han de apañarse con lo que pueden conseguir a precio de oro, pues fabricar
un cañón es relativamente fácil, pero hacer uno que no estalle al segundo disparo ya es
otra cuestión.
Desde la aparición de este cuerpo, murallas, castillos y fortalezas ya no son lo mismo
que eran: ningún muro mundano aguanta el bombardeo constante de una batería de
grandes cañones. Las divisiones de artillería, aunque poco numerosas, son muy valiosas
estratégicamente, y suelen contar con un grupo de ingenieros muy preparados,
acompañados por una masa de zapadores, polvoristas y ayudantes. Algunos tienen
asignados una pequeña fuerza de infantería o caballería para su defensa.

Organización
La moderna infantería profesional se organiza en compañías de unos cuatrocientos
hombres, cada una de ellas bajo el mando de un capitán, y normalmente con un cuerpo
de intendencia asignado, el portaestandarte que lleva la insignia de la compañía, algunos
músicos y cirujanos y un capellán. Ésta es la unidad organizativa del ejército. Por
encima de los capitanes, se sitúan los comandantes de regimiento, y el comandante del
ejército al que esté asignado. Oficiales y sargentos suelen llevar unas bandas de tela de
color alrededor del torso, como símbolo de rango. Los generales, además, tienen una
maza que representa el caudillaje de hombres.

Jefe de ejército
Mariscal, margrave o general son algunos de los títulos que se le pueden asignar a esta
figura. Se trata del oficial al mando de una fuerza militar al que se le consiente una
cierta independencia con respecto al poder político que organiza el ejército y le da unos
objetivos. Puede(y debe) tomar decisiones estratégicas que decidirán la vida de muchas
personas.

Comandante de regimiento
Éste es un título cuyas atribuciones varían muchísimo. En algunos regimientos, este
puesto es puramente nominal, un título nobiliario con el que se premia a los hijos del
Conde o a otras personalidades. Otras, tiene una función organizativa o militar. En otros
casos, se le otorga a un oficial veterano como una suerte de jubilación. Por lo menos en
la teoría, los capitanes han de obedecerle.

Capitán
Un oficial veterano, muchas veces de origen noble, que tiene el mando sobre una
compañía, dirigiéndola en batalla, ocupándose de que esté en las mejores condiciones en
todo momento y manteniendo la disciplina y la moral altas. Ha de tener dotes de líder,
diplomático y estratega. Los mejores capitanes son un ejemplo para sus hombres,
afrontando las dificultades de la vida en campaña y los peligros del combate. Otros
distan mucho de este ideal, y ven a sus hombres como peones que sacrificar en aras de
ganar influencia o estatus. No hay ni que decir cuales son los preferidos por los hombres
bajo su mando. Para la dirección de destacamentos(ejércitos formados por varias
compañías, pero en los que no participa todo el regimiento) se elige a un comandante
muchas veces el capitán más veterano.

Tenientes o sargentos mayores
Habitualmente existen dos de estos oficiales por regimiento, cuya función es ser las
manos y orejas del capitán. Transmiten órdenes a los sargentos, sirven de enlace con
otros capitanes y de ordenanzas para sus superiores y desempeñan otras funciones, más
relacionadas con la organización e intendencia que con el combate en sí. Es
relativamente habitual que los jóvenes militares de clase alta empiecen como tenientes,
para luego dirigir su propia compañía. A los tenientes que ascienden por su propios
méritos se les suele denominar sargentos mayores.

Sargentos y Veteranos
Los soldados veteranos muchas veces ascienden a puestos de oficialidad menores. Son
los llamados sargentos, de los que suele haber uno por treinta o cincuenta hombres.
Dirigen a los hombres en contingentes menores, le ensañan a los reclutas aquello que
tienen que saber, y mantienen la disciplina y la moral. Además, sirven de contacto entre
el soldado raso y la oficialidad.
Por otra parte, no todos los veteranos ascienden en la escala promocionando. Las tropas
más experimentadas pueden servir como guardias de élite para personalidades o pasar a
regimientos de renombre. En muchos regimientos, por ejemplo los de Reikland, existe
la figura del dopplesoldner o doble-paga, soldado reenganchado y experimentado que
cobra el doble que los novatos, de ahí el nombre. El arma tradicional de estos curtidos
soldados es la espada de puño(a dos manos) imperial. Los sargentos no
tienen un arma distintiva, aunque suelen llevar alabarda, espada y pistola.

Diferencia provinciales
En el Gran Principado de Reikland, modelo económico y militar del resto del Imperio,
el ejército profesional, eficiente aunque caro, es la base del ejército provincial. Sólo en
tiempos de necesidad se organizan levas. Este modelo es el que intentan seguir las
provincias sureñas.
Sin embargo, no todas las provincias son tan ricas como Reikland. Electores como el de
Talabecland han de conformarse con un esqueleto de varios regimientos profesionales
como ejército permanente, recurriendo a los mercenarios en épocas de necesidad.
Middenland aún cree en el sistema feudal. Los hombres libres han de entrenarse(esa es
la teoría) en el manejo de las armas(y el culto a Ulric se encarga de que siga siendo así)
y servir en el ejército en caso de guerra.
Por último, hay provincias pobres y constantemente amenazadas, las de la frontera
Norte. Sus gobernantes intentan retener a todos los soldados cualificados que puedan,
pero han de recurrir continuamente a las levas y a la ayuda de sus vecinos sureños,
sobre todo desde la invasión de Arcano. Aquí, las milicias cobran especial importancia.